Celebramos el segundo año de aniversario de “Hacia la Excelencia”…
¡Hola buscadores de excelencia! Me encanta el blog “Hacia la Excelencia” y sé que en su creadora, Cecy Yépez, tienen a una gran compañía en su jornada hacia una vida generosa y llena de amor. Tuve el honor de conocerla en un viaje misionero en San Lorenzo, Ecuador e inmediatamente se convirtió en mi “Ecuadorian Pixie” —Duendecilla Ecuatoriana. Por lo menos en Estados Unidos, una Duendecilla se asocia con el hecho de ser luchadora, poderosa, y hermosa. Su humor e ingenio están llenos de esta autodeterminación y simplemente no podemos evitar apreciarla por ello. Su poder viene del único Rey sobre todos los reyes y del Señor de todo. Ella nunca vacila en recordar a los demás esta fuente fundamental de bondad y gracia entregada a todos quienes aceptan a Cristo como su Salvador. ¿Y la belleza? Ella desborda de belleza. Su corazón está lleno de tan increíble amor para todas las personas y a través de él, ella comparte jornadas, historias y las verdades de muchos. Ella con sus propias palabras ora para que cada historia impacte El Reino de Dios para siempre. Estoy muy honrada de ser parte del blog «Hacia la Excelencia” y los aliento a apoyar obras de esta naturaleza llenas del Espíritu. ¡Que Dios los bendiga a todos!
Reji Laberje
Reji Laberje Author Programs, LLC.
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«…nuestros hijos están hechos para engancharse con las historias y Dios nos dejó en existencia el mayor libro de historias reales. Junte los dos aspectos y creo que surgirá un amor natural».
Reji Laberje
Reji nació en el área de Chicago, Illinois, pero creció justo al norte de allí, en un sector de mediana población llamado Manitowoc, Wisconsin, hija de un cartero y una madre abnegada. Tiene dos hermanas, Kim y Stacy (quienes son sus mejores amigas) y las tres se criaron juntas con creencias Ateas. Sin embargo, a los 33 años, Reji se bautizó y nunca más volvió atrás. Reji fue siempre una
artista que trabaja en el teatro, en la ciencia forense, el discurso en público, y en la escritura. Se graduó del colegio a una etapa temprana para mudarse y perseguir su sueño de actuación a los 18 años de edad. Obtuvo unos pocos papeles pequeños y estuvo un corto período en un programa de televisión local, pero era el trabajo diurno el que pagaba las cuentas al trabajar con clientes de habla hispana a quienes les tomaba las órdenes por teléfono. Al igual que muchos jóvenes soñadores y soñadoras, la actuación no era para Reji, así que terminó uniéndose al ejército donde orgullosamente aprendió a ser y a servir como Linguista Árabe para la Fuerza Aérea y la Agencia de Seguridad Nacional de los Estados Unidos. Durante su tiempo en el ejército, obtuvo su título en Comunicaciones Internacionales e Interculturales, y además conoció y se casó con su esposo Joe. El ejército tuvo a su familia viviendo y mudándose por todas partes y tanto ella como su esposo sirvieron en cada comunidad en la que vivieron, en las escuelas, cocinas, iglesias, grupos de scouts y organizaciones juveniles locales. Tras siete años de vivir en el área metropolitana de Washington D.C., dejaron de trabajar para el gobierno y se trasladaron de nuevo a Wisconsin para continuar la crianza de sus tres hermosos hijos, Bradley, Kimberly y Laura. Fue entonces cuando Reji retomó un pequeño negocio de escritura, discurso y enseñanza que ella siempre había desarrollado junto a sus muchos intereses y diversos trabajos en los últimos años y lo convirtió en su carrera de tiempo completo para crear Reji Laberje Author Programs, LLC. Ahora, a través de su compañía cuya visión es hacer impactos positivos y de gran alcance, y a través de su trabajo en el ministerio con los niños, la mentoría matrimonial, el liderazgo de grupos bíblicos pequeños, la difusión local, nacional e internacional, el curso Alfa (una clase de 10 semanas que enseña los conceptos básicos sobre Jesús y la Biblia), y por supuesto también escribiendo para muchos ministerios, Reji y Joe junto con sus hijos y muchas mascotas viven una vida siempre activa pero igualmente, una vida plena con Cristo en el centro.
¿Cuál cree usted que es la mejor manera para que los padres empiecen a enseñar a sus hijos e hijas pequeñas a seguir el camino de Dios, el camino hacia la excelencia en la vida?
En mi opinión, los padres y madres necesitan involucrarse en la educación religiosa de sus hijos e hijas. No sólo deben llevar a sus hijos/as al servicio eclesiástico o al campamento bíblico y sentirse satisfechos de que sus hijos e hijas son guiados por otros. En su lugar, solicite servir o ayudar de alguna forma. Haga preguntas a sus hijos e hijas. Aprenda con ellos. Asuma los mismos desafíos que sus hijos asumen cuando se trata de seguir el plan de Dios. Como padres de familia todavía somos los principales influenciadores de nuestros hijos. No es suficiente que sólo amen a Dios cuando son jóvenes. Amar a Dios es algo que puede ser muy intangible de captar para los niños. Sin embargo, amarnos — a personas que están físicamente presentes— es algo que ellos y ellas comprenden. Por lo tanto, al amar nosotros a Dios y ser parte de esa educación, los hijos e hijas pueden tener ese ejemplo con el cual pueden relacionarse.
¿Los niños disfrutan de forma natural cuando miran a los libros de historietas? Si es así ¿cómo pueden los padres y madres tomar ventaja de esto y usar recursos creativos para alimentar este interés natural, y ayudarlos a cultivar un hábito de lectura para toda la vida de la Palabra de Dios?
Una vez fui profesora de Matemáticas para una escuela de educación media en un entorno urbano. Todos los estudiantes estaban atados a la tecnología y un gran número de estudiantes atravesaban problemas familiares reales fuera de la escuela. En los mejores días, había caos, pero avanzábamos tratando de enseñar los requisitos básicos de la escuela y estábamos agradecidos por los pocos estudiantes a los que también podíamos llegar a un nivel emocional, ya que eso sería la marca real del éxito. Un día, tuvimos un corte de energía en la escuela. Ya que yo estaba enseñando en un aula sin ventanas, tuve que llevar a mis estudiantes a otra aula donde podíamos esperar hasta tener nuevamente electricidad. La indisciplina habitual sobrevino en un nuevo espacio sin tener alrededor ninguno de nuestros materiales habituales. Pregunté si alguno de los niños tenía un libro. Una niña me dio el título del libro que había estado leyendo. No recuerdo cuál era el libro, pero si mal no recuerdo, era algo que tenía que ver con un equipo de béisbol adolescente. Acababa de empezar a leer. En menos de un minuto estos adolescentes, todos ellos, se reunieron alrededor, formando una especie de semicírculo, para simplemente ESCUCHAR. Ellos estaban cautivados. Creo que parte de ellos estaban

Reji imparte educación en lectura, escritura y expresión oral a miles de estudiantes de primaria en todo Estados Unidos cada año para crear un mundo mejor a través de mejores palabras. Aquí, ella se encuentra con estudiantes de fuera de Milwaukee, Wisconsin en abril, 2015.
tan agradecidos de desacelerar. Otra parte de mí sentía tristeza de saber que algunos de estos estudiantes, tal vez nunca tuvieron a alguien que simplemente les lea. Creo que, hablando antropológicamente, estamos hechos para “contar historias”. Es la forma en la que llevamos nuestra historia, incluyendo la historia de Dios. Nos comprometemos de manera natural, no a través de la interfaz, sino mediante conexiones cara a cara. Leí el único libro de cuentos que pude encontrar en esa clase ese día, pero creo que los niños habrían estado igual de enganchados si hubiese tomado el periódico. Nuestra Biblia está llena de las obras más apasionadas y creativas de la historia. Yo les digo a mis estudiantes de escritura que no hay nada nuevo que puedan escribir que Dios (y Shakespeare) no lo hayan escrito; simplemente pueden traer sus voces únicas al concepto. No creo que debemos complicarnos con respecto a la Palabra de Dios, nuestros hijos están hechos para engancharse con las historias y Dios nos dejó en existencia el mayor libro de historias reales. Junte los dos aspectos y creo que surgirá un amor natural.
En su opinión, como escritor profesional, ¿Cómo se escogen materiales sanos, veraces y atractivos para niños? (Ya sean materiales basados en la biblia o enseñanzas positivas en general)
Creo que es muy importante brindar una amplia gama de opciones literarias a nuestros hijos e hijas, especialmente cuando tienen acceso a tantos temas mientras están fuera de nuestra presencia. Ellos ESTARÁN expuestos a una gran cantidad de los libros (o películas, para el caso) que podrían no ser nuestra primera opción para ellos. Por lo tanto, debemos ser nosotros quienes discutamos sobre esos libros con ellos. Por supuesto, la Biblia es EL libro más grandioso, pero no todo lo que mis hijos (o yo) leemos se basa en la Biblia, y eso está bien. Sólo que siempre recuerdo analizarlos desde la perspectiva de Dios.
Cuando se trata de fantasía, una de las cosas que personalmente disfruto leer y escribir, recuerdo a mis hijos que es Dios el Creador original y que estamos contentos de que nos haya dado tales imaginaciones vívidas. Intento encaminarlos hacia aquellos escritores creativos que tienen auténticos mensajes bíblicos, tales como C.S. Lewis. En esos casos, se puede aprovechar el interés del entretenimiento natural de su hijo (fantasía, en este caso) y también vincular el mensaje de Dios a nosotros. Una sola búsqueda en Google sobre “Autores Cristianos de Libros Seculares” conducirá a otro sinnúmero de increíbles libros que harán lo mismo que C.S. Lewis con relación a la enseñanza sobre el respeto a Dios.
Sin embargo, existen también libros que mis hijos y yo leemos que no tienen ninguna influencia bíblica. Eso también está bien, siempre y cuando no leamos algo que sea ANTI-Dios, siempre y cuando tengamos discusiones sobre los libros, y siempre y cuando los libros se entiendan como ficción. Mis dos hijas han leído la trilogía de The Hunger Games [Los Juegos del Hambre] y discutimos los paralelismos entre ella y nuestro mundo real. También hablamos sobre la diferencia que habría con Dios en el mundo Panem ficticio de la serie.
Al final del día, mientras existan debates sobre la lectura que se lleva a cabo en su hogar, usted —como padre o madre—tiene la capacidad de llevar a Dios a la literatura de sus hijos e hijas.
Finalmente, por favor comparta con nosotros una experiencia personal. ¿Cómo han ayudado los materiales bien desarrollados, a los padres y madres e incluso a los profesores a guiar a los niños y niñas en el camino de Dios, el camino hacia la excelencia en la vida?
Mientras mis obras escritas primarias consisten en libros para niños y adultos jóvenes, así como biografías de colaboración, también tengo material curricular a la par con mis programas de escritura en vivo y en forma de cursos de asesoramiento dirigidos a jardín de infantes hasta el décimo segundo año de estudios. Un modelo que es común seguir al crear estos materiales es el Modelo 5-E (Explorar, Explicar, Extender, Enganchar [participar], Evaluar).
Exploración, por lo general quiere decir que inicialmente se aprende sobre la obra o la lección que nos ocupa. Explicación es la discusión y estudio relacionado con la obra o la lección. Extensión permite

Cuando Reji preside eventos y autografía libros, se asegura de que cada niño y niña obtenga un tiempo de lectura uno a uno con ella. Reji y este pequeño de Chicago disfrutaron juntos “Max Explora Chicago” en Barbara’s Bestsellers en diciembre, 2014.
incursionar en otros recursos (y la Internet es una gran herramienta para la extensión). Enganche o participación se logra a través de algún tipo de aplicación práctica. Esto puede ser un juego, actividad, proyecto de arte, o incluso un informe tradicional. Evaluación es la comunicación acerca de cómo ese enganche o participación refleja el trabajo o lección.
Para la obra Cristiana, cuando escribo esas lecciones y ese material, agrego una “E” de apertura y de cierre que incluye “Entretenerse [disfrutar] con Su historia”, donde brindo referencias bíblicas adicionales, y “Ejemplificar”, a través del cual nos hacemos la pregunta sobre cómo, siendo Cristianos, podemos ser un ejemplo de Dios con respecto a la obra o la lección que tratamos.
Usted encontrará que los estudios bíblicos más publicados tienen todos estos elementos en ellos. Puede ser que no los llamen las 5 (o 7) lecciones E, pero existen oportunidades para comprender la Biblia, discutir sobre ella, analizar sobre un ejemplo de la vida práctica, brindar un ejercicio para aplicar la lección bíblica, y mirar en lo profundo de uno mismo para ver si el resultado es bíblico. Los mejores estudios también incluyen versos adicionales (como la E añadida, Entretenerse con Su Historia) y sugerencias de CÓMO vivir la Palabra de Dios en la vida cotidiana (Ejemplificar). Busque materiales que vayan más allá de las opiniones singulares tras un verso. Debe haber un medio para CONECTARSE con la Palabra de Dios en los materiales que usted elije utilizar para la enseñanza de la misma.
Usted no tiene que ser un maestro o un escritor para usar este modelo. Como padre o madre, usted puede tomar estos mismos pasos hacia la excelencia en la enseñanza de la Biblia. La idea es que no debemos hacer de la lectura de un versículo o capítulo el principio y el final de una lección. La palabra de Dios, en toda su perfección, no siempre es la más fácil de entender. Analícela. Discuta, hable de la vida real, aplique, rinda cuentas, siempre refiérase a la Biblia, y mire a nuestro mayor ejemplo en Cristo. Comparta con sus hijos cómo versículos específicos le han servido en el desarrollo de su propia vida.
Al final del día, siempre vuelve a ser activo en la educación bíblica de sus hijos. Como ya he dicho, estamos hechos para contar historias, pero —de manera más importante— somos una PARTE de Su historia.
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